Pilatos, en "La vida de Brian", la película de los Monty Python, tiene problemas para pronunciar la "rr". Creo que las dificultades le vienen del frenillo. Y el pueblo puñetero, que aguanta al poder -porque ¿qué otra cosa podría hacer?- pero que siempre lo ve en cueros, como al emperador del cuento, no hace nada más que proponerle que perdone a personajes con el nombre lleno de "erres". Cuando el irresponsable Pilatos se ve una y otra vez obligado a pronunciar el nombre "erradísimo" del que ha de perdonar -Barrabás-, el pueblo se revuelca de risa. El Movimiento del 15 M, como la puñetera plebe judía del film, no hace en estos días nada más que obligar a los pilatos/políticos a pronunciarse con veracidad sobre cuestiones sobre las que ellos siempre están obligados a mentir: división de poderes, ley electoral justa, que paguen los bancos la crisis... Joder, y los pilatos/políticos venga a hacer el ridículo. Cuando hablan, nos revolcamos de risa por el suelo. Y ellos, solo aciertan a decir lo que mi sobrino Pepe le decía a su madre que quería lavarlo: "Mamá, déjame en mi rinconcico, con mi mierdecica y mi chupe".
viernes, 20 de mayo de 2011
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¡Ah! Pablo ¡Si pudieramos dejarlos en su rinconcico con su mierdecica y su chupe!
ResponderEliminarQuerida Ana María, me temo que ese rinconcinco ocupe media España. Gracias, amiga.
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