
Al pesimismo de la razón hay que oponer el optimismo de la voluntad, pensaba mientras escuchaba los comentarios de los tertulianos de Intereconomía, ayer, viernes por la tarde. Nada hace pensar que estos movimientos populares tan oportuna e inteligentemente surgidos en los días de campaña electoral y de reflexión, etc., etc., vayan a persistir y a obtener algo más que la mirada agradecida de mucha gente que no sabía cómo dejar en evidencia la estupidez de la “clase política” actual.Intereconomía, la emisora ultramontana, fue la única que dedicó al acontecimiento una atención sostenida e interesada: “El gobierno tiene que cumplir la ley y desalojar las plazas”, pedían los contertulios. En algún momento, se parecían a los que jaleaban a ETA, en el País Vasco, y le pedían a la banda, cobardes, y escondidos en una pintada: “Mátalos”. Dos o tres tertulianos pedían al gobierno y a Rubalcaba, parapetados en la Ley: “desalójalos”. Ante la novedad de la situación, que tiene a todo el mundo contra las cuerdas, y callados, o modulando mucho a los más inteligentes, los necios comentaristas de Intereconomía sólo proponen el palo. Creen que va a ganar las elecciones el partido de sus amores, pero quieren arrasar. Una joven de 17 con la cabeza abierta por la “policía de Rubalcaba”, o un jubilado disruptivo, fulminado por un ataque al corazón en el momento en que el guardia levanta la porra para molerlo a palos, piensan ellos, que les llenaría la cesta de votos para poder hundir en el mar, al mal único y demoníaco, origen de todos los males.
Hay, pese a todo, motivos para estar ilusionado. Las fotos de unos jóvenes acampados hoy sábado en el patio de la casa de Esperanza Aguirre, sanos, guapos, decididos y felices recuerdan a las hierbas que explotan todas las primaveras, y ahora más con las lluvias, en los campos. La voluntad imparable de la vida nueva que florece, quizá arrase el pesimismo recocido de los decepcionados y caducos.
Después del invierno siempre hay primaveras, decía Amauri Perez.
ResponderEliminar"Aunque éste sea un duro país sin fronteras", amigo Gran Junior. Un saludo y gracias.
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