Mosquitero freudiano
Leo en foros de religiosa militancia atea que no debemos confiarnos, que el momento de desconcierto que vive la Iglesia Católica, por su mala cabeza, es pasajero. Que también estuvo la cosa a pique de un repique en el Renacimiento y hasta ahora, y que aquellos Papas estaban bastante menos protocolizados que los actuales y que parte de su tiempo lo dedicaban a infringir uno por uno todos los mandamientos y a recrearse en la ciénaga de los pecados que ellos habían diseñado, para atrapar, castigar y perdonar finalmente a los fieles. Y no pasó nada. Pero, argumentan los que creen que la Iglesia no sale de ésta y que termina regida democráticamente por los hermanos mayores de las cofradías, que la situación actual es novedosa: no hay Inquisición y están las redes sociales. En el muro de un comecuras virtual he leído una frase misteriosa: "A enemigo que huye, jaula de plata", me temo que se quiere que los que hayan delinquido terminen en nuestras lujosas cárceles.
Atrapasueños
Aquí, en Andalucía, donde ya hemos vaciado de sustancia al catolicismo tradicional y lo hemos convertido en un discurrir de cristos y de carretas con butano y paellera, estamos diseñando una alternativa para algo que sólo la religión atiende, el disparatado empeño de no morir para siempre y ser felices sin interrupción. Por lo pronto, delante de la puerta principal de Las Angustias, en Granada, La librería Atrapasueños, está capturando los sueños imposibles, para cuando la Iglesia desaparezca. 
......Cuidado, no mentemos a la bicha....que como consecuencia de la Reforma Luterana o también llamada protestante.....apareció el Concilio de Trento, con su Contrarreforma, de tan nefasta influencia la cultura española.....Es decir una Iglesia católica reaccionaria e intransigente.
ResponderEliminar¡Sabe Dios lo que pueden terminar haciendo estos ancianos solterones!
ResponderEliminar¿No conoce la leyenda india del "Atrapasueños?
ResponderEliminarEl nombre de la caseta de la feria del libro, “Atrapasueños” te atrapa, es original e ingenioso, voy a ir para verlo y dejarme atrapar comprando algún libro.
ResponderEliminarSobre lo que dices acerca de la religión y otras cuestiones, me siento muy afortunada por no haber estado nunca atrapada por la misma; es curioso, a pesar de la educación religiosa de mi padre en el internado, la religiosidad de mis abuelos paternos, en mi casa, que había una gran libertad con esos temas y con casi todos, pero impregnados por un acusado puritanismo, propiciado por mi padre, repito, he tenido la fortuna de no sentirme atrapada por las dudas de conciencia religiosa, tan frecuente en los años jóvenes. (Voy a tener que pagar derechos de autor por lo de “atrapada” pero me ha gustado la palabreja). En ese sentido, he sido más libre, siempre he actuado conforme a mi conciencia y ha sido en Los Hombres con mayúscula, no en los Dioses, en los que me he apoyado. Hay una frase que no se de quién es, pero que he oído con frecuencia, ya te diré donde, y que ha marcado mi pensamiento y tal vez mi proceder: “Cuando todo lo que hay alrededor de mi, se me derrumba, me quedan los hombres y sólo con ellos, lo que hay de auténtico y verdadero”.
Espero que me disculpes por esta sarta de reflexiones, que te lanzo cual boomerang, pues seguro que obtendré respuestas.
Los “atrapasueños” (“dreamcatchers”) consisten en una especie de tela de araña confeccionada, supongo, con la técnica del macramé.
ResponderEliminarEn alguna tribu de los indios de América del Norte –creo que los sioux- los elaboraban entrelazando hilos y plumas de vistosos colores. Servían para filtrar los sueños y que sólo pasaran los buenos, para ello, los colocaban en la cabecera de los durmientes. Los malos sueños quedaban fuera.
Así que es un hallazgo el pie de foto que usted coloca en esta entrada, “Mosquitero freudiano”. No sé si a mi hijo le habrá servido para pasar y sobrepasar mejor su adolescencia uno de esos mosquiteros que le traje de Nueva York hace bastantes años; habrá que preguntarle -al estilo de los periodistas de la “prensa rosa”- qué siente, si el atrapasueños que colgó durante un tiempo de la cabecera de su cama lo ha convertido en un hombre feliz. Lo que sí sé es que todavía no ha recurrido al psicoanálisis.
María Pita, no sabía lo que era un "Atrapasueños". Ilustro la entrada, a partir de tu información, con la foto de un atrapasueños, que me he bajado de la red. Gracias.
ResponderEliminarMe encanta la palabra "atrapasueños".Pero espero que lo que sueña nuestra iglesia no se cumpla.Esta iglesia que no se moja ya ni con agua bendita.
ResponderEliminarPara que apareciera la basílica hicieron desaparecer una iglesia (la de santa Úrsula y santa Susana). Lo de atrapar sueños está al caer.
ResponderEliminarMuchas gracias
(Anónimo Susana)
Mariola y Susana, hermanas, vosotras sí que estáis forjadas con el mismo material de los sueños. Gracias. Salud.
ResponderEliminarGracias a ti Pablo, por tus siempre acertadas palabras. Salud.
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