jueves, 4 de febrero de 2010

Amor en el lugar del excremento

Juan Ramón Jiménez, al final de su vida, en su poema Espacio, escribe: Amor, amor, amor (lo cantó Yeats) «amor en el lugar del escremento». Los seres humanos, hijos de un dios ironista que con sus manitas de alfarero moldeó sexo y cloaca tan próximos, caemos en su broma y juntamos libros, bragas,  poemas y lejías.

 Edición de autor

Pero hay que descartar el prejuicio de que los vendedores de bragas no tienen estudios. Por la foto, lo que desde luego no tiene este comerciante es buen gusto o es un fanático del kitsch . Pese a todo, estoy convencido de que él ha escrito el libro que regala. El autor y el dueño de la mercería pueden ser la misma persona. Parece una edición de autor, posiblemente se trate de un delicado manojo de versos o de un opúsculo de algún erudito local, asuntos ambos que no venden. Nada que ver con Las cincuenta sombras de Grey.

14 comentarios:

  1. Te respondo con una frase de un curioso libro que estoy leyendo " El tutú " cuyo autor se llama "Princesa Safo " :

    "...como la ignorancia es eterna, siempre habrá forma de sacarle partido ..."

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  2. Además, sólo la 3ª braga te da el acceso a la sabiduría. Como te compres 2, te quedas a las puertas.

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  3. Este mercero y poeta, sólo compone sus expositores de lencería con estrofas de tres bragas... Cierta sabiduría, la de Dante, por ejemplo, en la Divina Comedia, se expresa toda en tercetos.

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  4. Adriana, estoy buscando como un loco en las bibliotecas públicas de Granada y del Área Metropolitana, El Tutú para leerlo, tiene "unas pintas" muy atractivas.

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  5. El libro lo he buscado en dos catálogos colectivos, el de bibliotecas universitarias y el de las bibliotecas públicas estatales, en las primeras NO está, y en las segundas, sólo en la Biblioteca Pública de Aragón.

    Yo lo tengo porque me lo encontré en una librería

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  6. Adriana, le voy a sugerir a la directora de la Biblioteca Provincial de Granada que lo compre. Gracias

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  7. Al final, todo tiene que ver con la mercadotecnia o el márketing, entendido como el "conjunto de principios y prácticas que buscan el aumento del comercio, especialmente de la demanda".Quizás los editores deberían plantearse el regalar bragas con cada libro para vender más. Aunque, para aumentar las ventas, yo que ellos regalaba algo más contundente y cambiaba la braga por algún salto de cama de satén, una faja levanta traseros o un tanga de perlitas que,a pesar de ser dolorosísimo, tiene mucho éxito. Habría cola en las librerías...

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  8. No sabía yo que las perlas habían bajado tanto de nivel. En Góngora,la frontera es la oreja de Galatea:

    Purpúreas rosas sobre Galatea
    La Alba entre lilios cándidos deshoja:
    Duda el Amor cuál más su color sea,
    O púrpura nevada, o nieve roja.
    De su frente la perla es, eritrea,
    Émula vana. El ciego dios se enoja,
    Y, condenado su esplendor, la deja
    Pender en oro al nácar de su oreja.

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  9. Sí amigos, hemos emputecido a nuestro mejor amigo: el libro. Antaño vehículo de transmisión de sabiduría, ahora ha aumentado su carga y en sus anchísimas espaldas transporta frustraciones, productos de limpieza y lencería de "a euro". Y no nos engañemos, la culpa no la tiene El Altísimo, cuyo ancestral vértigo le impide echarnos una visual (seguro que se fía de nosotros). La culpa es del hombre, como lo es del cambio climático o de . El libro es una criatura dócil que se deja domeñar y hasta maniatar para hacer lo que mejor sabe: ser observado y casi siempre ignorado. Bendita la braga que un libro lleva pues de ella será la gloria de hacer leer al ignorante. Amén.

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  10. Addendum: "...cambio climático o de "Belen Esteban´s Show". ! Cago en tó!.

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  11. Efectivamente, la perla ha bajado de nivel físico-geográfico humano, sin embargo, socialmente, ha ganado muchos puntos en los últimos años,entre miles de adolescentes de la ESO. En "La casa de Bernarda Alba" de Lorca, las perlas del anillo de pedida de la hermana mayor, Angustias, representaban las lágrimas que se habrían de vertir por el poco amor que Pepe el Romano profesaba a la primogénita. O eran el preludio de una tragedia que se cernía sobre la casa...Ahora, las perlas del tanga, son tan sólo preludio de un buen revolcón, acompañado, generalmente de un gran resacón...Una vía directa a la pérdida de la inocencia sin apenas preliminares, siguiendo un deseo intenso de convertirse en parte del grupo. Sin, muchas veces, respetar la "velocidad personal" de cada individuo. Recomiendo leer "Velocidad personal" de Rebecca Miller, de Anagrama, 2003.

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  12. Irene, no tenemos nada en contra de los buenos revolcones, siempre que se produzcan a la velocidad personal precisa y se blinden con las adecuadas precauciones, para no tener que ir a pedirle a "Mamá Bibiana" la píldora del polvo de antes. Que la química es muy mala...

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  13. Pepe, entre la irreverencia de los libros con bragas y la grandilocuente frase de Pessoa "La única verdad es la literatura" tiene que haber un punto medio de equilibrio: quitarle las bragas a los libros y bajarle los humos a Pessoa.

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  14. Pablo, que un buen revolcón a tiempo y a velocidad precisa, es irrefutable. Que hay que blindarse y ser precavidos, es irrebatible. Que la química es muy mala, es innegable; pero que la química es muy buena, es incuestionable. El problema que tenemos nosotras/os, es que no hay química entre "Mamá Bibiana" y nosotras/os...

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